Basta, de por sí estoy temblando y soy muy chillona, es una emoción enorme, gracias de verdad, porque todo lo que hago, lo hago por ustedes…esta noche soy toda tuya Auditorio; pensé que iba a estar nerviosa pero me siento como en casa y ¿saben que es lo que pasa cuando estas cómoda? Te sueltas más', indicó.
Posteriormente dio paso a un popurrí de baladas y con un nuevo cambio de ropa, ahora con un vestido corto en tonos negros brillantes y unos botines, con el cual además cantó 'Ese hombre no se toca'.
La cantante estuvo acompañada por más de 8 músicos, entre los que se encontraban violinistas, los cuales se colocaron en un entarimado que tenía en el centro unas largas escaleras con luces y de fondo una gran pantalla.
A este concierto tampoco le hicieron falta elementos como llamaradas que salía del escenario, luces en forma de cascadas y confeti en tonos plateados.
El primer invitado de la noche fue Alfonso Pichardo, vocalista de Moenia, de quien María José dijo ser un gran amigo y una gran persona y tras esa presentación, interpretaron 'No importa que el sol'.
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